Lucina Gonzalez

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La Magnifica

Glorifica mi alma al Señor y mi espiritu se

llena de gozo, al contemplar la bondad de

Dios mi Salvador.

Porque ha puesto la mirada en la humilde

sierva suya y ved aquí el motivo porque me

tendrán por dichosa y feliz todas las

generaciones. Pues ha hecho en mi favor

cosas grandes y maravillosas. El, que es

Todopoderoso y en día se extiende de su nombre

infinitamente santo, cuya misericordia se

generación en generacion, a todos cuantos le

temen. Extendió el brazo de su poder, disipo

el orgullo de los soberbios, trastornado sus

designios. Desposeyó a los poderosos y elevó

à los humildes.

A los necesitados los llenó de bienes y a los

ricos los dejó sin cosa alguna. Exaltó a Israel

su siervo acordándose de él por su gran

misericordia y bondad.

Así como lo había prometido a nuestro padre

Abraham y a toda su descendencia por los

siglos de los siglos.

Así sea.

~

Salmo 23

El Señor es mi pastor, nada me falta, en

verdes pastos él me hace reposar y a donde

brota agua fresca me conduce.

Fortalece mi alma,

por el camino del bién me dirige por

amor de su nombre.

Aunque pase por quebradas muy oscuras no

tengo ningún mal, porque tú estás

conmigo, tu bastón y tu vara me protegen.

Me sirves a la mesa

frente a mis adversarios,

con aceites, tú perfumas mi cabeza y

rellenas mi copa.

Me acompaña tu bondad y tu favor

mientras dura mi vida,

mi mansión será la casa del Señor por largo,

largo tiempo.

Amén.