Nació en Uriangato, Guanajuato el 10 de enero de 1929. Pasó su niñez junto a sus padres disfrutando diariamente en la Huerta de la Alegría, que estaba en su casa paterna. Conoció al que fuera su esposo a la edad de 14 años y a la edad de 15 años contrajeron matrimonio. Al comienzo de su matrimonio, al igual que todas la parejas enfrentaron problemas tales como pobreza, enfermedades, y dificultades que supieron sobrellevar y los llevo a vivir casi cincuenta años de matrimonio.
De esta relación nacieron once hijos. Para María su prioridad fue el atender a sus hijos, brindarles amor, cariño, consuelo y apoyo. Llegó a conocer a cada uno individualmente. Conocía sus cualidades y debilidades. Conocía la personalidad de cada uno, el tono de voz, y podía leer cada una de sus miradas. Continuamente trabajó para dar a sus hijos las necesidades más indispensables. Alentó a sus hijos a salir siempre adelante, a ser honestos y les inculto el respeto hacia los demás.
María fue una mujer de fe que confió plenamente en Dios. Su relación personal con Dios, la llevo a ser una mujer fuerte espiritualmente, una mujer con sabiduría que supo mantenerse firme en los momentos más difíciles de su vida. Su misión durante su existencia tuvo objetivos tales como mantener la unión familiar, fomentar la paz entre sus hijos, y su gozo principal era ver reunidos a sus hijos en torno a ella y así lo mantuvo hasta el momento de su partida. En sus últimos años cosechó el fruto de su dedicación; la semilla de amor que sembró durante su vida en cada uno de sus hijos dio fruto abundante.
Arrangements under the direction of Eternal Hills Memorial Park, Mortuary and Crematory, Oceanside, California.
SHARE OBITUARY
v.1.8.18