El dia martes 26 de octubre el mundo dejo de girar, los relojes pararon y nuestros corazones quedaron con un inmenso vacío que nadie mas podrá llenar. Beatriz, una hija bondadosa, esposa virtuosa, madre ejemplar, hermana comprensiva, tía afable, abuela tierna y amiga servicial recibió sus alas y las puertas del cielo fueron abiertas para recibirla. Nos deja con el corazón destrozado pero de igual manera nos deja el consuelo de saber que tendremos un angel mas que cuidara de nosotros desde el cielo.
Tus alas ya estaban listas para volar pero nuestro corazón nunca estuvo listo para verte partir. Te queremos mucho y jamás te vamos a olvidar. Allá en el cielo en la otra vida nos volveremos a encontrar. Descansa en paz, que aquí en la tierra ya tu no estas. Dejaste amor, dejaste huellas, y tu legado sera inmortal.
