Francisco Julio Reyes

Nació Francisco Reyes un 2 de diciembre de 1924 en Mantua, provincia de Pinar del Río, en el seno de una familia de humildes campesinos. Hijo de Juan Reyes y María Luisa Márquez, quienes crearon una familia de 9 hijos; Gumersindo, Carlos, Carmelo, Orosmán, Pablo, Paula, Catalina, Francisco, ya fallecidos; sólo sobrevive el menor de ellos, Juan, a quien cariñosamente llamamos Guango.

Francisco estableció una familia de 6 hijas en su matrimonio con Juana Santiesteban, fallecida a los 33 años de edad en Cuba. Asumió sus labores del campo para sostener a sus hijas en ausencia de la joven madre. A Francisco le sobreviven sus hijas Zenaida, Herminia, Aleida, Haydee, Norma y Lidia, que llenaron sus días de amor y lo rodearon de numerosos nietos, biznietos y tataranietos.

Fue un padre de familia que gustaba ver a sus hijas reunidas en torno a él. Con su sonrisa campechana y cubana, amante de la música, el canto, la guitarra y el punto cubano. No perdió su natural sonrisa ni siquiera en sus últimos instantes en este mundo. Guajiro de pura cepa y creyente de Jesucristo nuestro Señor. Murió rodeado de ese calor humano y familiar que supo forjar con naturalidad y entrega por los suyos, descendencia directa suya.

Llamado cariñosamente por sus hijas, nietos, biznietos, tataranietos, sobrinas y sobrinos como “Pipo.” Sabemos que vivirá eternamente en nuestra memoria y nuestros corazones. ¡Descanse en la Paz del Señor el alma de Pipo Francisco! Esto no es un adiós, es sólo un hasta luego. Volveremos a vernos, Pipo, en el Amor de Cristo Jesús, nuestro Señor.

El servicio fúnebre será el lunes 30 de agosto, a las 6:00pm en la Funeraria González de Dale Mabry Hwy. y Hamilton, Tampa.

Su nieto sacerdote, el Padre Dayan Machado Reyes, quien lo asistió espiritualmente en los últimos instantes de su vida terrena, oficiará el martes 31 de agosto a las 10:00am, la Misa de cuerpo presente, por el descanso eterno de su alma en la parroquia San José en Tampa.