Rafael sale de la República de Cuba muy jovencito, antes de la revolución y se instala en New York. Muy joven, comienza a trabajar en una fábrica de mucho prestigio, donde logró alcanzar éxitos. Su relación con su padre no fue muy grata, su admiración, respeto y buena relación fue por su mamá.
El con su esfuerzo llevó a su mamá a vivir en New York y se hizo cargo de todos sus gastos, brindándole calidad de vida. Esa es la razón, por la cual lo conocemos más por Marín, apellido de su mamá, que por Pérez.
El hermano Marín, luego de perder a su mamá y a su único hermano, comenzó a enfermarse y se refugió en el espiritismo. Cansado de buscar sanidad y significado de vida lo invitan a visitar una iglesia pentescostal. El impacto del Espíritu Santo en su vida, fue instantáneo. Libre, salvo y con un cántico nuevo, comenzó su nueva vida en Cristo en la ciudad de New York, hasta el día de hoy.
Nunca se casó, ni tuvo hijos, su familia siempre fueron sus hermanos en Cristo.
Cuando se retira de su trabajo en New York, viene con un compañero de trabajo puertorriqueño, de vacaciones y quedó enamorado de Puerto Rico. Su amigo, también era cristiano y ambos se instalan en Puerto Rico. Marín se queda en San Juan y comienza un nuevo trabajo, en el cual también se retiró lleno de vida y salud.
Su vida espiritual en Santurce, Tu Parada, estuvo enfocada en el Poder de la oración. Todo el tiempo se esforzó por modelar, enseñar y anhelar que todos conocieran la importancia de la oración.
Rafael Marín, un hombre sumamente inteligente, sabio, reservado y cuidadoso de su vida íntima, espiritual y social. Celoso con la vida espiritual de la iglesia y del Reino. Su amor por las misiones y los misioneros eran profundos y genuinos. Se le otorgó el honor de ser u. Diácono vitalicio.
Amante del café negro, bien cargado, vestirse bien y combinado. Marín hablaba alto, pues era sordo y le encantaba hablar y saludar a su única familia, sus hermanos en Cristo, que con tanto amor los encontraba los domingos y miércoles en el culto de oración.
Hoy celebramos su vida y valoramos su entrega, por sus hermanos de Santurce Tu Parada.
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v.1.8.18