Bivian Tello

Bivian Mary Tello, a devoted mother and grandmother, passed away peacefully on the morning of December 19, 2024, under the loving care of her daughter.

Born in Peru, Bivian later migrated to the United States, where she built a life for herself and her daughter in the vibrant heart of New York City. Her life was defined by unwavering devotion—to her role as a mother, to her faith, and to the Sisters of Life, with whom she found a cherished community in her later years.

Bivian was a kind, compassionate, and strong woman, dedicated to serving and caring for those in need. She had an extraordinary gift for anticipating the needs of others, soothing pains, offering comfort, and most importantly, lifting others up through her prayers. Her love for her family, friends, and the Lord was deep and abiding, and her presence was a true blessing to all who knew her.

She is survived by her beloved daughter, Sandy T. Mackie, and son-in-law, William C. Mackie. Her legacy lives on through her cherished grandchildren: Alexis Jayden Tello-Lawrence, Kyle James Mackie, and Sophia Eve Mackie. Bivian is also survived by her three brothers: William Tello, Nestor González, and Jaime Milla.

Bivian Mary Tello will be remembered with love, gratitude, and admiration for her remarkable life of faith, service, and dedication to her family and community.

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En memoria de María Bivian Tello

Bivian Mary Tello, una devota madre y abuela, falleció pacíficamente la mañana del 19 de diciembre de 2024, bajo el amoroso cuidado de su hija.

Nacida en Perú, Bivian luego emigró a los Estados Unidos, donde construyó una vida para ella y su hija en el vibrante corazón de la ciudad de Nueva York. Su vida estuvo definida por una devoción inquebrantable: a su papel como madre, a su fe y a las Hermanas de la Vida, con quienes encontró una querida comunidad en sus últimos años.

Bivian era una mujer amable, compasiva y fuerte, dedicada a servir y cuidar a los necesitados. Tenía un don extraordinario para anticipar las necesidades de los demás, aliviar dolores, ofrecer consuelo y, lo más importante, animar a los demás a través de sus oraciones. Su amor por su familia, sus amigos y el Señor era profundo y duradero, y su presencia fue una verdadera bendición para todos los que la conocieron.

Le sobreviven su amada hija, Sandy T. Mackie, y su yerno, William C. Mackie. Su legado sigue vivo a través de sus queridos nietos: Alexis Jayden Tello-Lawrence, Kyle James Mackie y Sophia Eve Mackie. A Bivian también le sobreviven sus tres hermanos: William Tello, Nestor González y Jaime Milla.

Bivian Mary Tello será recordada con amor, gratitud y admiración por su notable vida de fe, servicio y dedicación a su familia y comunidad.