Alejandro Andrade Pastor

58 years old

December 3, 2024

It is with heavy hearts that we announce the passing of our beloved Alejandro Andrade Pastor on December 3, 2024, at the age of 58. Alejandro, known lovingly as Chimino by his childhood friends, El Mexicano by his close friends, and Loco-Loco by his grandson, was a man whose presence in our lives was a true blessing. His kind spirit, boundless generosity, and unwavering love for his family will live on forever in our hearts.

Born in Iztapalapa, Mexico City, Mexico, Alejandro made his home in the United States, where he built a life filled with hard work, passion, and dedication. As the founder of Amigos Pintores, Alejandro poured his heart into his work, using his incredible skills in carpentry and construction to help rebuild homes, especially in New Orleans after Hurricane Katrina. He was a man who believed in the importance of family and always lending a hand to those in need.

Alejandro was the proud father of three children: Mia Alejandra Andrade, Alejandro Andrade, and Yolanda Dayanira Alvarado, and a devoted grandfather to Lizandro Mateo Alvarado. He also cared for two stepdaughters Naomi Brooks and Oprah Brooks. He was also blessed to share his life with his loving partner, Guadalupe Muriel Brooks. Surviving him are also his siblings: Yara Silvia Andrade Pastor, Laura Soledad Andrade Pastor, Yolanda Deyanira Andrade Pastor, Angel Andrade Pastor, Rafael Andrade, and Maria de la Luz Andrade. His family was everything to him, and he made sure they always knew they were his top priority.

Outside of his work, Alejandro had a deep love for life. He was an avid soccer fan, and his loyalty to his childhood team, C.D. América, was something he proudly passed down to those around him. Alejandro was also an adventurer at heart, whether driving across the country or enjoying a ride on his motorcycle, he embraced life with passion and joy. But above all, he found joy in the simple moments with those he loved.

What truly set Alejandro apart was his incredible heart. He was the type of man who would give you his last dollar, offer a roof over your head, or lend a listening ear, without ever expecting anything in return. He lived a life defined by his selflessness, compassion, and a deep sense of loyalty to his family and friends. Alejandro took care of everyone he loved, always putting others first, and he never hesitated to make those around him feel valued, special, and loved.

To know Alejandro was to experience a kind of love that was pure and unconditional. He will always be remembered by his family as Papa Alex—a nickname that embodies the warmth, care, and tenderness he shared so freely with everyone around him.

Though our hearts are broken, we find comfort knowing that Alejandro’s spirit will live on in each of us—in every act of kindness, every moment of love, and every memory we hold dear. He leaves behind a family that is forever grateful for the time we had with him. Rest in peace, Papa Alex. You will be deeply missed, but your love will never fade from our hearts.

In lieu of flowers, the family requests donations to Mia Alejandra Andrade's college fund, which will help support her education since Alejandro is no longer with us. Contributions can be made by contacting Yolanda Alvarado at 504.315.8014

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Alejandro Andrade Pastor

58 años

3 de diciembre de 2024

Con corazones pesados anunciamos el fallecimiento de nuestro amado Alejandro Andrade Pastor el 3 de diciembre de 2024, a la edad de 58 años. Alejandro, conocido cariñosamente como Chimino por sus amigos de la infancia, El Mexicano por sus amigos cercanos y Loco-Loco por su nieto, fue un hombre cuya presencia en nuestras vidas fue una verdadera bendición. Su espíritu amable, generosidad infinita y amor inquebrantable por su familia vivirán para siempre en nuestros corazones.

Nacido en Iztapalapa, Ciudad de México, México, Alejandro hizo su hogar en los Estados Unidos, donde construyó una vida llena de trabajo duro, pasión y dedicación. Como fundador de Amigos Pintores, Alejandro puso todo su corazón en su trabajo, utilizando sus increíbles habilidades en carpintería y construcción para ayudar a reconstruir hogares, especialmente en Nueva Orleans después del huracán Katrina. Fue un hombre que creía en la importancia de la familia y siempre estaba dispuesto a tender una mano a los necesitados.

Alejandro fue un orgulloso padre de tres hijos: Mia Alejandra Andrade, Alejandro Andrade y Yolanda Dayanira Alvarado, y un devoto abuelo de Lizandro Mateo Alvarado. También cuidaba con amor a sus dos hijastras: Naomi Brooks y Oprah Brooks. Además, tuvo la bendición de compartir su vida con su amada pareja, Guadalupe Muriel Brooks. También le sobreviven sus hermanos: Yara Silvia Andrade Pastor, Laura Soledad Andrade Pastor, Yolanda Deyanira Andrade Pastor, Angel Andrade Pastor, Rafael Andrade y Maria de la Luz Andrade. Su familia lo fue todo para él, y siempre se aseguró de que supieran que eran su prioridad.

Fuera de su trabajo, Alejandro tenía un profundo amor por la vida. Era un ávido fanático del fútbol y su lealtad a su equipo de la infancia, C.D. América, era algo que orgullosamente transmitía a los que lo rodeaban. Alejandro también era un aventurero de corazón, ya fuera conduciendo por todo el país o disfrutando de un paseo en su motocicleta, él abrazaba la vida con pasión y alegría. Pero sobre todo, encontraba felicidad en los momentos simples junto a los que amaba.

Lo que realmente diferenciaba a Alejandro era su increíble corazón. Era el tipo de hombre que te daría su último dólar, te ofrecería un techo sobre tu cabeza o te prestaría un oído atento, sin esperar nada a cambio. Vivió una vida definida por su desinterés, compasión y un profundo sentido de lealtad hacia su familia y amigos. Alejandro cuidaba de todos los que amaba, siempre poniendo a los demás primero, y nunca dudaba en hacer sentir a los que lo rodeaban valorados, especiales y amados.

Conocer a Alejandro era experimentar un tipo de amor puro e incondicional. Siempre será recordado por su familia como Papa Alex—un apodo que encarna el calor, el cuidado y la ternura que compartía tan libremente con todos los que lo rodeaban.

Aunque nuestros corazones están rotos, encontramos consuelo al saber que el espíritu de Alejandro vivirá en cada uno de nosotros—en cada acto de bondad, en cada momento de amor y en cada recuerdo que atesoramos. Deja atrás una familia que siempre estará agradecida por el tiempo que compartimos con él.

Descansa en paz, Papa Alex. Te extrañaremos profundamente, pero tu amor nunca se desvanecerá de nuestros corazones.

En lugar de flores, la familia solicita donaciones para el fondo universitario de Mia Alejandra Andrade, el cual ayudará a apoyar su educación, ya que Alejandro ya no está con nosotros. Las contribuciones se pueden hacer contactando a Yolanda Alvarado al 504.315.8014