Jesus Huberto was the only son to Maria and Huberto Salgado and had five sisters. Among his long list of friends, family and loved ones, he was known as Jesse, Beto, Dad, Tio, Grampa Chato and Abuelito.
In 1965, he married Maria Elena (Flores). To that union produced three children, Beatriz Elena Salgado, Rosanna Salgado McDonald and Jesus Huberto Salgado, Jr. He later married Mary Garcia and remained joined in matrimony to her until his death.
Jesus Huberto was a devout Catholic and belonged to San Pedro de Jesus Maldonado Catholic Church in El Paso, Texas, where he attended mass regularly every week until his recent illness over the last few months. He also attended Corpus Christi where he served in the Welcoming Ministry. During the beginning of the COVID pandemic, when mass was held virtually, Jesus Huberto belonged to St. Mark’s Catholic Church. He took it upon himself to visit the church every week to volunteer to clean the statue of the Virgen de Guadalupe. He took great pride in keeping it beautiful for all to enjoy and considered this an act of love and faith.
He came to the United States as an immigrant in the late 1960s, quickly using his many skills to secure stable employment as a machinist. Towards the end of his career, he worked at Phelps Dodge Copper Refinery. He retired in 2003 after being diagnosed with leukemia. Jesus Huberto followed a strict medical regiment and was eventually declared to be in remission.
Jesus Huberto was known for his love of family, motorcycles, soccer, good food and well-made cowboy boots. He enjoyed traveling to campsites around the country with his wife and beloved dog, Brownie, and going on motorcycle day trips with his son. Jesse was also known as a self-taught, resourceful man who could fix nearly anything and was always generous to share his knowledge, time, and abilities. Most will remember him as someone with a quick smile who did not like to sit still. He preferred to be doing things, fixing things, or helping others. He had a love for life and enjoyed dancing at family gatherings, almost always surrounded by his doting sisters.
Jesus Huberto is survived by his children Beatriz Elena Salgado of College Grove, TN, Rosanna Salgado (Thomas E.) McDonald of Castro Valley, CA and Jesus Huberto (Patricia Arguelles) Salgado of El Paso, TX; grandchildren Jesse-Lee Douglas Keith, College Grove, TN; Samuel Noah Keith, Knoxville, TN; Ileana Salgado McDonald, Los Angeles, CA; Khalil Mateo McDonald, Castro Valley, CA; Andrea Salgado, Tucson, AZ and Gabriel Salgado, El Paso, TX. He is also survived by his wife Mary Garcia, El Paso, TX; stepdaughter Angie (Casey) Wetsel; step grandson Jaiden Wetsel of Albuquerque, NM, stepson Tury (Myra) Velasquez, step grandsons Ian and Yunel Velasquez and step granddaughter Emily Velasquez of Giddings, TX. He will also be missed by his godson Armando Canales, Oxford, UK, and goddaughter Laura Pennington, El Paso, TX.
Lastly, he is also survived by his adoring sisters Maria Elena Salgado, Delia Yolanda Acosta and Irma Acosta. He was preceded in death by his sisters Cleotilde Canales and Angelina Iñárritu. He will be missed by his many nieces, nephews, grand-nieces and grand-nephews, long list of cousins and many special friends.
Jesús Huberto Salgado nació el 21 de abril de 1945 en Villa Ahumada, Chihuahua. Falleció el Martes 28 de noviembre de 2023 en El Paso, Texas.
Jesús Huberto era el único hijo de María y Huberto Salgado y tuvo cinco hermanas. Entre su larga lista de amigos, familiares y seres queridos, era conocido como Jesse, Beto, Papá, Tío, Grandpa Chato y Abuelito.
En 1965 se casa con María Elena (Flores). De esa unión nacieron tres hijos, Beatriz Elena Salgado, Rosanna Salgado-McDonald y Jesús Huberto Salgado, Jr. Posteriormente se casó con María García y permaneció unido en matrimonio a ella hasta su último día de vida. Jesús Huberto era un católico devoto y pertenecía a la Iglesia Católica San Pedro de Jesús Maldonado en El Paso, Texas, donde asistía a misa regularmente todas las semanas hasta su reciente enfermedad en los últimos meses. También asistió a Corpus Christi donde sirvió en el Ministerio de Bienvenida. Durante el inicio de la pandemia de COVID, cuando la misa se hacía de manera virtual, Jesús Huberto pertenecía a la Iglesia Católica de San Marcos. Se propuso visitar la iglesia todas las semanas para ofrecerse como voluntario para limpiar la estatua de la Virgen de Guadalupe. Le llenaba de orgullo mantenerla hermosa para que todos la disfrutaran y lo consideraba un acto de amor y fe.
Llegó a los Estados Unidos como inmigrante a finales de la década de 1960 y rápidamente utilizó sus muchas habilidades para conseguir un empleo estable como maquinista. Al final de su carrera, trabajó en Phelps Dodge Copper Refinery. Se jubiló en 2003 tras ser diagnosticado con leucemia. Jesús Huberto siguió un estricto régimen médico por años y finalmente fue declarado en remisión.
Jesús Huberto era conocido por su amor por la familia, las motocicletas, el fútbol, la buena comida y las botas vaqueras bien hechas. Le gustaba viajar a campamentos por todo el país con su esposa y su querido perro, Brownie, y realizar excursiones de un día en motocicleta con su hijo. Jesse también era conocido como un hombre autodidacta e ingenioso que podía arreglar casi cualquier cosa y siempre era generoso al compartir sus conocimientos, tiempo y habilidades. Quienes le conocieron lo recordarán como un hombre de pronta sonrisa a quien no le gustaba quedarse quieto. Prefería estar haciendo cosas, arreglando cosas o ayudando a los demás. Amaba la vida y disfrutaba bailar en las reuniones familiares, casi siempre rodeado de sus cariñosas hermanas.
A Jesús Huberto le sobreviven sus hijos Beatriz Elena Salgado de College Grove, TN, Rosanna Salgado (Thomas E.) McDonald de Castro Valley, CA y Jesús Huberto (Patricia Arguelles) Salgado de El Paso, TX; nietos Jesse-Lee Douglas Keith, College Grove, TN; Samuel Noah Keith, Knoxville, Tennessee; Ileana Salgado McDonald, Los Ángeles, CA; Khalil Mateo McDonald, Castro Valley, CA; Andrea Salgado, Tucson, AZ y Gabriel Salgado, El Paso, TX. También le sobreviven su esposa Mary García, El Paso, TX; su hijastra Angie (Casey) Wetsel; su nieto Jaiden Wetsel de Albuquerque, NM, su hijastro Tury (Myra) Velásquez, sus nietos Ian y Yunel Velásquez y su nieta Emily Velásquez de Giddings, TX. También lo extrañarán su ahijado Armando Canales, Oxford, Reino Unido, y su ahijada Laura Pennington, El Paso, TX.
Por último, también le sobreviven sus adoradas hermanas María Elena Salgado, Delia Yolanda Salgado-viuda de Acosta e Irma María Salgado-viuda de Acosta. Le precedieron en su partida sus hermanas Cleotilde (Coty) Salgado de Canales y Angelina Salgado-viuda de Iñárritu. Sus muchas sobrinas, sobrinos, sobrinas nietas y sobrinos nietos, su larga lista de primos y muchos amigos especiales lo extrañarán siempre. Descanse en Paz.
FAMILIA
Maria E. Garcia SalgadoWife
Jesus H. SalgadoSon
Arturo VelasquezSon
Beatriz SalgadoDaughter
Rosanna Salgado McDonaldDaughter
Angelica WetselDaughter
10Grandchildren
3sisters
COMPARTA UN OBITUARIO
v.1.8.18